La temporada de huracanes está a la vuelta de la esquina. Pero le tenemos buenas noticias: según el último pronóstico de la Universidad Estatal de Colorado , Estados Unidos, ésta será más ligera de lo normal.
¿Las malas noticias? Las predicciones pueden ser erróneas e incluso una sola tormenta puede causar estragos en un negocio.
Para aquellas empresas que tiene la mala fortuna de enfrentarse a un evento climático catastrófico, el seguro continúa siendo una red de seguridad esencial. Pero las políticas tradicionales ya no son las únicas soluciones. Las soluciones paramétricas, o basadas en eventos, están ganando terreno con las compañías que desean un proceso de adjudicación más simple y un pago más rápido.
Piense de forma creativa
Las soluciones paramétricas cubren la probabilidad de que ocurra un evento predefinido, como por ejemplo vientos de más de 90 millas por hora, según las mediciones de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica. Las políticas paramétricas también incluyen un mecanismo de pago predeterminado que se activa cuando se cumplen o superan los parámetros del evento predefinido.
De manera importante para las organizaciones, estas políticas basadas en índices abordan un gran punto de dolor para los compradores de cobertura de seguro tradicional: el largo y complicado proceso de adjudicación que puede dejar a las organizaciones en el limbo financiero. Debido a que un detonante paramétrico se basa en parámetros predefinidos, el proceso de adjudicación tiende a ser relativamente continuo.
Tomemos el ejemplo de un hotel desplomado por fuertes vientos que dejan una ola de destrucción. Si se compró una solución basada en eventos, todo lo que necesita probar es que el viento, medido por el índice acordado, cumplió o excedió los parámetros predefinidos. Libera tiempo, durante un período de otra manera frenética, para centrarse en la reconstrucción.
Rápidas indemnizaciones ayudan a la recuperación
Un segundo beneficio relacionado es que las soluciones paramétricas proporcionan una rápida liquidez después de un evento catastrófico. Los pagos pueden ocurrir muy rápido, y los fondos pueden usarse para cualquier prioridad. Si bien muchas compañías canalizarán el dinero del seguro hacia reparaciones inmediatas, también pueden ayudar a los empleados que se vean personalmente afectados. Por ejemplo, cuando el huracán María devastó a Puerto Rico, algunas compañías farmacéuticas quedaron relativamente ilesas, gracias a la resistencia de sus plantas. Pero las propiedades personales de muchos trabajadores fueron devastadas. El hecho de poder acceder rápidamente a los fondos puede brindar a las organizaciones en situaciones similares la oportunidad de brindar ayuda a los empleados, lo que puede acelerar su regreso al trabajo y ayudar a los empleadores a evitar largas interrupciones en el negocio.
Las empresas también pueden invertir en áreas que no son cruciales para sus operaciones, pero que sin embargo pueden interrumpirlas. Por ejemplo, una tormenta podría destruir el paisaje de un resort, que normalmente no está cubierto por una política general de propiedad. Si bien no es esencial para el funcionamiento del negocio, el paisajismo puede afectar la experiencia general del cliente y, por lo tanto, podría influir de forma negativa en nuevas reservas y propiciar cancelaciones.
Las soluciones paramétricas no son de ninguna manera un reemplazo de la cobertura tradicional, sino un complemento. Normalmente, las organizaciones no requieren información adicional para iniciar la conversación con su profesional de seguros, pero cuando se trata de proporcionar evidencia de una reclamación, ciertamente se requiere menos información.
A pesar de los pronósticos favorables, cuando entramos en la temporada de huracanes de este año, las organizaciones no tienen más remedio que tomar precauciones. Las soluciones alternativas como la paramétrica pueden ser una de ellas.